La plaza de Legazpi es un lugar situado al sur de la ciudad de Madrid, la cual tiene 3 millones de habitantes en su area urbana. Esta plaza podria considerarse una de las principales puertas de Madrid por su conexion con todas las poblaciones del sur del area metropolitana (que reune una poblacion adicional de 1 .5 millones de habitantes). Este lugar lleva siendo objeto de diferetnes debates desde hace decadas, por su posicion estrategica y por acoger en sus entornos diferentes dotaciones publicas de gran interes arquitectonica y de un enorme potencial social que, sin embargo, no estan suficientemente ocupadas o utilizadas y que en este sentido, son un ambito de la ciudad lastrado con una condicion de ineficiencia notable. 

 

El area donde se ubica la plaza de Legazpi pertenece al distrito de Arganzuela y ha sido historicamente una zona periferica de la ciudad, inicialmente destinada a pastizales y desocupada hasta la llegada del ferrocarril, momento a partir del cual se fue poblando de manera irregular con estaciones de mercancias, industias y almacenes en torno al Manzanares, rio poco caudaloso que bañaba esta ribera. La naturaleza pseudoindustrial de esta zona se ha ido transformando paulatinamente durante todo el siglo XX en un tejido con uso dominante residencial en el que, sin embargo, se han mantenido algunos grandes contenedores dedicados a otras actividades. 

 

Muchos de ellos se destinaron a usos publicos, principalmente a establos de ganado o mercados municipales de carne y de frutas. Otros, a usos privados como la produccion o distribucion de energia o a la fabricacion y almacenaje de materiales de construccion o electrodomesticos. 

 

Casi la totalidad de estas intalaciones ha ido abandonando su uso original y se encuentra en proceso de reconversion desde las ultimas decadas del siglo pasado.

 

Entre las dotaciones públicas de uso colectivo, actualmente de desigual intensidad de ocupacion, debemos destacar las siguientes:

 

a) El antiguo matadero municipal, convertido desde el año 2009 en un centro cultural que fomenta las ayudas a la creación artística, sobretodo en proyectos de naturaleza participativa. Este matadero reconvertido (que conserva su nombre y es un lugar de encuentro en la ciudad) tiene ya en funcionamiento una escuela de danza, dos salas de teatro, una sala de cine, una biblioteca, un gran espacio para exposiciones, un laboratorio urbano y un edificio de gestión municipal del distrito, pero aun dispone de tres edificios vacíos sin uso programado.

 

b) El antiguo mercado de frutas y verduras actualmente sin uso. En el año 2006 fue objeto de un concurso de ideas para privatizar parte de su suelo, aunque dicho concurso no ha sido desarrollado y parece que va a volver a ser puesto en marcha por el actual gobierno de la municipalidad.

 

c) El antiguo recinto del mercado de ganado, reconvertido en invernadero y utilizado para el cultivo de plantas subtropicales con el único objeto de ser visitado.

 

d) El antiguo taller de maquinaria municipal que ha sido rehabilitado para usos administrativos.

 

Estos cuatro conjuntos están situados en la margen izquierda del río y entre todos forman un continuo edificado con espacios públicos intermedios de gran potencial urbano. Además, están vinculados al parque Madrid Río, un ámbito ajardinado de más de 120 hectáreas y 7 kilómetros de longitud realizado entre 2007 y 2015 sobre una autopista construida entre 2004 y 2007 bajo la cota de la ciudad. Esta autopista, antes de ser enterrada, separó el río Manzanares del resto del tejido urbano de Madrid durante más de 30 años, ya que transcurriría a lo largo de las dos orillas del cauce, ocultándolo y haciéndolo inaccesible por completo.

 

En la orilla opuesta, frente al antiguo matadero municipal, se sitúa un solar de grandes dimensiones que perteneció a una antigua fábrica de máquinas del lavado doméstico, y que está sufriendo una transformación radical, ya que será destinado a la construcción de un enorme centro comercial.

 

Por otro lado algunas asociaciones de vecinos, privadas de espacios donde reunirse y realizar actividades, han constituido una plataforma denominada “EVA espacio vecinal de Arganzuela” para solicitar al ayuntamiento de forma colectiva y auto organizada, el permiso para poder ocupar algunos de los edificios vacantes de propiedad pública.

 

Todas las circunstancias, hacen que esta zona se encuentre con la actualidad en un delicado equilibrio, a punto de perder su esencia y de sufrir una definitiva gentrificación o cuanto menos, una transformación acelerada ajena al natural ritmo urbano.